ESTRANGULAN
LA “DEMOCRACIA”, LA MORDAZA DESPÓTICA EXTIENDE
SU MISERIA
A los compañeros y compañeras del movimiento
social costarricense y de toda Latinoamérica, saludarles
con la estima de siempre, deseándoles un avance sostenido
y, a zancada firme en la lucha cotidiana. Los pueblos del
continente tenemos que desenganchar las alertas, en relación
con los acontecimientos políticos que en Costa Rica
se están dando, e intimar más aún, los
lazos de amistad y solidaridad mutua al calor del convulsivo
período coexistente en los conflictos sociales y por
la libertad de nuestras naciones.
En la Ciudad de San Ramón-Costa Rica, se origina uno
de los pocos espacios radiales donde todavía se pude
escuchar la voz del pueblo. En el mismo, el movimiento social
y popular ramonense, de occidente y costarricense, han tenido
los micrófonos abiertos, para la denuncia, la agitación,
la movilización, la organización, en general
un canal que le posibilita expresar sus ideas, pensamientos,
propuestas, y en el cual promueve la lucha por la defensa
de los derechos populares, la soberanía, y por la transformación
social.
Se trata del Noticiero "Sideral Informa", trasmitido
por la radioemisora "SIDERAL" todos los días entre
las 17:00 y 18:00 horas (5a 6, p.m.), y que produce y dirige
el periodista Carlos Salazar. Según la información
que se nos está haciendo llegar, la administración
de la Emisora esta presionando al director del Espacio
Noticioso, para que suspenda el programa al concluir el mes
de agosto de los corrientes. Se indica que las razones son
de carácter económico. Sin embargo, lo que pareciera
estar de fondo son factores políticos, los cuales se
pueden encontrar en posibles maniobras y acciones de los sectores
gobernantes y del capital; entregados de lleno a los intentos
por imponer el infausto "tlc".
No esta lejos la probabilidad del uso de la intimidación,
el chantaje; y por supuesto, es presumible el ofrecimiento
de contratos comerciales, de la compra del espacio y de otros
negocios, que estén doblando la voluntad de los Dueños
o de la sociedad que administra la empresa radial. Esa es
una práctica sobradamente conocida, de fuerzas económicas
y políticas, que servilmente, están empujando
el paquete neo-colonial de privatizaciones, concesiones, de
"aperturas" y "modernizaciones" de las
instituciones públicas de servicios fundamentales.
Del mismo modo, tales sectores tiránicos,
los que consuman autoritariamente en la Asamblea Legislativa,
convenciones internacionales, y otros “proyectos”
nefandos para la soberanía nacional y agresores de
los derechos humanos,_ los han dado en llamar la agenda complementaria,
pero, que en realidad es la "AGENDA DE INSTRUMENTACIÓN" de
esa infamia apodada "tratado de libre comercio"_, como
mecanismo para establecer el régimen despótico
de las corporaciones transnacionales, auspiciado por la legalidad
propalada por la Organización Mundial del Comercio
y cubierta por el monstruo militar del pentágono, que
aplica la estrategia de agresión y terror de la Casa Blanca, son
un linaje rastrero y ponzoñoso.
No les ha importado destrozar la
Constitución Política, han atropellado
la legislación vigente; las veces que les ha dado la
gana, se han atrevido a torcer barrotes y botar la separación
entre los Poderes y, a derribar la independencia entre las
entidades ejecutivas, parlamentarias y judiciales, así
como, han liquidado la imparcialidad de los Tribunales,
Sala Constitucional, Cortes, Tribunal Supremo de
Elecciones y demás instituciones estatales.
Los vende patria, títeres del capital transnacional,
los obtusos neoliberales criollos, los mercaderes especialistas
en la especulación, y los empresarios ávidos por
incrementar sus ganancias; a cualquier costo, con
el mayor desprecio a la dignidad de los costarricenses, como
una afrenta a la inteligencia, como una estocada a la conciencia,
se han abalanzado con dólares, con la demagogia
y la mentira, con las amenazas más denigrantes, y el
intervencionismo más vil y deplorable; perpetrado
por los emisarios de Washington, en su perversa maquinación
por someter a nuestro país.
Con una actitud despectiva hacia el pueblo, los grupos hegemónicos_
políticos y capitalistas_ están utilizando
todo el aparato del estado, toda la maquinaria que les puede
ofrecer el poder, en sus pretensiones por arrastrar
a la nación costarricense a una condición
de colonia, y reducir a su población a la esclavitud
y a la opresión. Derramando cinismo en cada uno
de sus actos, como si fuesen desechos residuales de
su esencia, usan todos los mecanismos oficiales, los recursos
del fisco, los medios técnicos, transporte, infraestructura
pública, a los funcionarios de las instituciones
y todo el contingente de ministros, diputados, regidores y
burócratas en general del gobierno, en su obstinación
por coronar su despropósito.
Los hermanos Arias no han escatimado nada; de su arsenal
tenebroso, en su macabro objetivo por implantar las medidas
y las políticas que han tranzado con Estados Unidos,
correspondiendo con los planes de expansión de
la corporatocracia internacional y de dominio
económico, político y militar del imperialismo.
Ejecutan con fidelidad la desventura, en su papel de testaferros al
servicio de los magnates de la metrópoli y de su patrón;
el genocida George Bush, monigote de la mafia fascista más
terrorista de la historia.
En su macabra misión como lacayos de las
nuevas bandas de invasores, no han tenido reparo en boicotear
y aplastar todo derecho, garantía social o individual,
libertades constitucionales, o legalidad, que se antepusiera
a sus conjuraciones y sus planes. Su desfachatez ha sido
tal, que no les ha importado que la normativa jurídica
reinante, fuese creada básicamente, por las mismas
clases dominantes sirviéndose de ella para perpetuarse
en el poder. Por eso hoy; si el “estado de derecho”;
del cual tanto se aprovechan; les estorba, lo barren como
pasar el filo del machete por la frágil maleza. No han
tenido vergüenza para declarar con la altanería
más tendenciosa, que en la práctica han
establecido la dictadura desde una "democracia electoral".
De tal manera, que así como han implantado un sistema
de inhumanos “campos de concentración”
en las plantaciones, fábricas de ensamblaje y maquilas,
vilipendiando los derechos laborales, vejando las garantías
individuales y sociales de los y las trabajadoras, y aterrorizándoles
con el chantaje del despido, si no se ajustan a sus reglas
y apoyan a los empresarios, al capital extranjero y la línea
del gobierno. También, han preparado las leyes, los
códigos penales y organismos judiciales para intimidar
a los sectores populares, mediatizarlos, neutralizarlos y
desmovilizados. Lo anterior complementado con el despliegue
e intensificación de las actividades de vigilancia,
hostigamiento y coerción sobre la dirigencia, los grupos
de activistas y el movimiento social en su conjunto.
No es de extrañar, por todo lo enunciado más
arriba, que hayan puesto en la mira de sus intrigas, igualmente,
a los pocos medios de prensa que ejercen un periodismo independiente,
reflexivo, pluralista, amplio, inteligente, interactivo, y
lo más importante que abre oportunidades a los sectores
populares y, se han convertido en los únicos espacios
que le han permitido al movimiento social costarricense, expresar
sus planteamientos. La gran prensa capitalista, perteneciente
a las diferentes fracciones de la oligarquía y, monopolio
ideológico, comercial y político de la plutocracia,
reflejo de la “verdad única” de las fuerzas
sociales imperantes en la sociedad, no le abre ninguna oportunidad
al pueblo para que pueda manifestar sus puntos de vista.
Generalmente los medios de comunicación
de masas que pertenecen a organizaciones gremiales, agrupaciones
representativas de la diversidad de los sectores sociales,
de colectivos, partidos, movimientos y de organizaciones de
izquierda, son pequeños y de cobertura limitada. Contar
con radio o teledifusoras que ofrezcan espacios abiertos al
intercambio de ideas, de análisis político,
de debate sobre temáticas comunales, de barriada, ciudadanas,
regionales, sectoriales, nacionales, o internacionales, en
noticieros, o en programas de variedad, es una virtud; y quizá,
se puede indicar como una significativa oportunidad; que en
la realidad política actual en Costa Rica, es sin duda
alguna escasa. De ahí, que las fuerzas del oscurantismo
que hoy controlan el poder; empecinadas en llevar a cabo sus
ominosos propósitos, hayan iniciado un complot para
amordazar, eliminar, censurar o simplemente reprimir, estos
medios de la prensa popular, para sacarlos del aire utilizando
los más burdos y abominables métodos y subterfugios.
Hoy cuando ya han silenciado varios programas,
cuando le han coartado la palabra a periodistas e intelectuales;
entre ellos, al politólogo Álvaro Montero Mejía,
a quien prohibieron y le confinaron una emisión televisiva
semanal, y que se trasmitía por el Canal 13_ Canal
estatal de Costa Rica_, y a la periodista Iris Zamora, que
tenía sendas transmisiones, en el mismo Canal y en
Radio Monumental. Todas estas emisiones orientadas al análisis
político y de la realidad nacional. Además,
se ha amenazado con clausurar el noticiero del compañero
periodista, y luchador social Carlos Salazar. Las luces rojas
de la destrucción definitiva de las libertades fundamentales,
en Costa Rica se han encendido como nunca. Las manos depravadas
de los dictadorzuelos de Zapote (Casa Presidencial), se encuentran
inmiscuidas en esta maquinación odiosa.
Por lo tanto, debemos aprestarnos a la denuncia
de este acto de violación de las libertades constitucionales,
de los derechos humanos, y a promover e implementar el apoyo
y la solidaridad con el Periodista Carlos Salazar. Hay que
apuntalar y revalidar los programas radio-televisivos críticos,
como el puntualizado. Fusionemos nuestra acción para
preservar y fortalecer el radio-noticiero del compañero
Salazar, sobre todo en momentos cuando cada situación,
como la descrita, es una reyerta que se debe enfrentar con
presteza, en el combate patriótico por la soberanía,
por los derechos populares y por la emancipación de
nuestros pueblos.
Estamos en la obligación de llamar
concienzudamente y con perseverancia, a la movilización
general del pueblo, el camino de la lucha; en los actuales
momentos, es la acción beligerante por tomar las calles,
lanzarse a una escalonada, diversa, autogestionaria y simultánea
protesta, que desemboque en una indestructible huelga general
e incontrastable rebelión popular. En consecuencia
las batallas por las libertades civiles y políticas,
entre ellas, la salvaguardia del derecho democrático
a la libre manifestación y expresión, es un
reto permanente y categórico.
Oscar Barrantes Rodríguez
Miembro:
Comité Cívico de Occidente
Asamblea del pueblo
Agosto de 2007.
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