El bloque verde se solidariza con los muelleros de Limón en su lucha contra la concesión privada de los muelles.
En este momento los muelleros limonenses están librando una batalla contra la concesión a la empresa privada de los muelles, que actualmente administra la JAPDEVA.
Con sacrificio y valentía los compañeros y compañeras en huelga son la avanzada del pueblo costarricense que defiende sus instituciones frente a los propósitos del TLC anexionista que nos quiere imponer la camarilla empresarial de Oscar Arias, mediante el cual buscan la privatización de activos públicos, la ruptura de monopolios y la liberalización comercial, para su propio beneficio.
Denunciamos que, en las tres últimas administraciones neoliberales se han aplicado diferentes mecanismos para desfinanciar las inversiones de JAPDEVA necesarias para desarrollar de manera adecuada sus servicios, y crear un cierre técnico, con el propósito último de deteriorar su calidad y erosionar el fuerte apoyo social con que cuenta la Institución, para finalmente justificar su privatización o concesión.
Apoyamos la propuesta hecha por los compañeros en huelga para el fortalecimiento de JAPDEVA, la única institución 100% limonense y exigimos al Gobierno que le de a JAPDEVA las herramientas necesarias para que aumente la eficiencia y sea un modelo de desarrollo entre los puertos de la región, lo que implica:
1. No permitir la apertura, ni la privatización, ni la venta de activos, ni la concesión de sus servicios. El Estado es el encargado de suministrar servicios básicos y estratégicos como son los Puertos, primordialmente los del Caribe por donde transita el 80% del comercio internacional vía marítima.
2. Garantizar la calidad del servicio, brindándose con sentido de oportunidad, con el menor precio posible, siendo solidarios con los diferentes servicios, con eficiencia y eficacia, garantizando continuidad en la prestación de los mismos y con la tecnología más conveniente para el desarrollo sustentable del país. Es mejor una empresa pública que un monopolio privado.
3. Mantenerle como una Institución autónoma, garantizándole autonomía plena (de administración y de gestión financiera), sin sujeción a leyes especiales.
4. Otorgar a la Institución su carácter de autoridad portuaria en el Caribe costarricense.
5. Garantizar que se mantenga la doble actividad de la institución y se respeten los principios y objetivos de su ley, como ente rector de la actividad portuaria y promotor del desarrollo de la provincia.
6. Promover la despolitización, democratización y la participación social en la gestión de la Institución. La enorme politización con que se han manejado decisiones estratégicas de JAPDEVA evidencia que es necesario replantear los niveles de injerencia que el Gobierno pueda tener a lo interno de la Institución, así como facilitarle los instrumentos financieros y administrativos para que su accionar pueda responder a criterios estrictamente técnicos y estratégicos, con libertad de acción.
7. Promover la rendición de cuentas en todos los niveles de la gestión Institucional y, primordialmente la de los responsables superiores de la Institución. Al ser una institución pública, los jerarcas de JAPDEVA deben estar en capacidad de responderle a los costarricenses claramente por su gestión, ya que están administrando recursos que le pertenecen a toda la sociedad.
8. Establecer que la gestión de su recurso humano sea planificada de tal forma que garantice la mejor calidad en la prestación de los servicios que brinda la Institución.
9. Garantizar una gestión que, en el campo portuario se enmarque dentro del concepto de desarrollo sustentable, entendido como aquel que manteniendo el equilibrio macroeconómico, permite el desarrollo nacional en función de mejorar la calidad de vida de la población presente y futura.
10. Otorgar a la Institución la autorización para invertir en infraestructura y equipo portuario para competir con los puertos de la región y estar a nivel de la competitividad.
|